Inconformidad.

No podia soportarlo ni un minuto mas, por mas que mi madre hacia esfuerzos por calmarme con respecto a lo de la marca no podia. Simplemente no podia dejarlo asi ¿quien se creia que era? Debia de decirle varias cosas, y no pensaba tragarme mis palabras como lo habia hecho con mi hermana para que no se preocupara. ¿Por que era tan malditamente sensible? No me gustaba en lo absoluto. Tome a Drachill y le dije el lugar que tenia que buscar, urgando en los archivos de mi madre habia encontrado informacion util, menos mas que los thestrals tienen buen sentido de orientacion. Llegamos a un palacio oscuro. Lo desmonte rapidamente, y camine con paso firme. El me seguia los talones.

-Dunkel...- grite con voz potente escuchando el eco de mi voz en las paredes. Esto me estaba matando, necesitaba... necesitaba saber cosas. -Dunkel- volvi a gritar esperando que alguien apareciera.

Mire a los chicos que se me habia aparecido enfrente, con desprecio. No tenia gans de lidiar con nadie mas que con Dunkel.

-Vengo a ver a Dunkel- dije entre dientes expresando en cada silaba un dejo de furia e impaciencia, me cruze de brazos sabia que no me dejarian pasar tan rapido.

Caminaba con Miranda y Ida por las murallas,cuando pasamos por la puerta,vimos a los guardias con una chica,era la que me había encontrado hace poco,me puse mi mascara y así los tres nos dirigimos hacia ellos-¿Que sucede?-

-¡Ah!,una semidiosa,no hemos visto una desde que los piratas bajaban de las montañas a robarse a los niños y violar a las mujers cantando villancicos de navidad-fume mi cigarro.

Mire a las tres figuras que acaban de llegar, con igual desprecio que a los demas. Pero no ahi no estaba la persona que queria ver, a la que queria gritarle y reclamarle de que ahora todos en mi casa sufrieran de una histeria total.

-Eso esta fuera de interes. Lo unico que quiero es ver a Dunkel- conteste entre dientes, estaba demasiado alterada, pero no perderia el control. Aunque esta vez no era mi hermana la que sufriria las consecuencias.